jueves, 14 de noviembre de 2013

HALOGETON SATIVUS (Barrilla fina) EN LA MANGA, FORTUNA, SIERRA DE LA PILA , VALLE DE RICOTE Y EN EL CAMPO DE MOLINA. Fotos de septiembre a noviembre


Etimología: el nombre genérico está compuestos de dos términos griegos: háls, halós (=sal) y geiton (=vecino), porque estas plantas gustan de la vecindad del mar. El epíteto específico viene de satum,l participio pasado del verbo latino sero (=sembrar, plantar), es decir que se siembra o planta, cultivado, doméstico.

Hábitat: taludes margosos, cultivos de secano, terrenos áridos y nitrificados o removidos, saladares y ramblas.

Distribución: Península Ibérica y N de África. S y SE español. En nuestra Región abunda en cotas bajas, sobre todo de la mitad sur.

Floración: septiembre y octubre

Usos: se trata de una planta que tuvo en la antigüedad gran importancia económica porque de ella se obtenía la sosa (carbonato sódico). Durante la Edad Media alcanzó gran importancia para la fabricación de jabón y de vidrio (una referencia muy temprana señala que en 1189 el monasterio de Poblet concedió al soplador de vidrio Guillem el derecho a recolectar la planta a cambio de diezmos y doscientas libras de vidrio plano). En el siglo XVIII España exportaba grandes cantidades de carbonato de sodio obtenido a partir de las cenizas de las plantas cultivadas para ese propósito. Fue tal la importancia de esta actividad que la exportación de la semilla de esta planta era un delito punible con la muerte. Para la obtención de la sosa fueron utilizadas distintas especies de plantas cultivadas en el Levante español que crecen en terrenos salados (ricas en oxalato de sodio que, por acción del calor, se convierte en carbonato). Por incineración de las plantas se obtenían "barrillas", de las que se conseguía por lixiviación con agua y cristalización posterior, el carbonato sódico.
































































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